Explican que el crecimiento del consumo de carne en Argentina se debe al retraso del precio respecto de la inflación

La entrevista tuvo como disparador el dato de que Argentina continúa siendo el país con mayor consumo de carne vacuna del mundo. “Al consumidor le va bien. Hay un volumen importante destinado al consumo. Para que se tenga noción: contra un consumo que en el 2022 estuvo en torno a los 48 kilos por habitante y por año, en los primeros cinco meses de este año, la oferta al mercado interno alcanzó casi 54 kilos por habitante y por año. Es decir seis kilos más, porque efectivamente hay mucha más carne en el mercado debido a la liquidación. Los productores al no poder retener hacienda en los campos por falta de pasto (debido a la sequía) la están enviando a faena. La exportación ha mantenido volumen y lo que ha crecido es el consumo interno”, expuso el experto.

Tonelli calificó como “bastante transparente” y sostuvo que cuando hay liquidación, en este caso por la sequía, se pueden tomar medidas paliativas pero el gobierno no puede resolver el tema, precisamente porque los precios se producen por cuestiones exógenas, que escapan al manejo del gobierno. En ese sentido, el entrevistado consideró que la situación “es un factor que, de alguna manera, ayuda a que la inflación no siga subiendo más”.

Tras recalcar que el precio de la ganadería está muy atrasado, agregó que “lamentablemente, tarde o temprano ya sabemos lo que pasa: se da vuelta la taba y se producirá una situación contraria a la actual”. “Calculo que para 2024 y 2025, el precio va a estar muy alto y habrá una recuperación de valores toda vez que se van a perder, antes de fin de año, más de dos millones de cabezas con esta liquidación por la sequía”, ilustró y agregó que la recuperación de los precios vendrá con las lluvias, ya en las próxima primavera.

Un dato que aportó Tonelli fue que este año se estará faenando el 11 por ciento más que el año pasado y que eso determina la sobreoferta en el mercado interno.